Para conmemorar la llegada del milenio, el Ayuntamiento de Valencia decidió, hace 11 años, disparar una mascletà. Aquel 1 de enero, como en cada ocasión que se celebra un acontecimiento pirotécnico, miles de personas disfrutaron como si fuera un día de fallas. Y así durante una década.

Sin embargo, la crisis y el delicado estado financiero de las arcas municipales ha obligado a replantearse un disparo que han protagonizado durante años los mejores pirotécnicos y que el año pasado ya tuvo que reducir un 70% su presupuesto, con lo que el disparo costó 8.000 euros.

Así, la Concejalía de Fiestas ha decidido cancelar este acontecimiento, así como la mascletà napolitana que cada mes de marzo se celebraba en la playa de la Malvarrosa y que ha llegado a congregar a más de 50.000 personas en vísperas de la semana grande de las fallas. También este acontecimiento, que disparaba una pirotecnia italiana, se recortó este año, ya que los 700 kilos de material explosivoque se dispararon en 2010 quedaron reducidos a 400, casi la mitad, lo que obligó a reducir el tiempo del disparo hasta los 15 minutos.

Así lo confirmaron ayer fuentes de la Concejalía de Fiestas, que explicaron que antes de suprimir otro tipo de actos «preferimos prescindir, por ejemplo, de la mascletà del 1 de enero, que no tiene demasiada tradición, por lo menos hasta que vengan mejores épocas». Así, atrás van a quedar aquellos grandes espectáculos pirotécnicos que, sin las limitaciones por espacio y seguridad que tiene la plaza del Ayuntamiento, se convertían en un acontecimiento comparable a cualquier disparo de fuegos artificiales nocturno.

En Año Nuevo se ha llegado incluso a superar la tonelada de material, que en el caso de la mascletà napolitana alcanzó las 4,5 toneladas. Así, las miles de personas que disfrutaban en la Alameda y en la Malvarrosa de estos actos pirotécnicos ahora tendrán que conformarse con las mascletàs del 1 al 19 de marzo en la plaza del Ayuntamiento, o la Nit del Foc.

Una de las primeras consecuencias de la cancelación de este disparo es que no tendrá que solicitar el Ayuntamiento de Valencia, por tanto, el permiso a la Dirección General de Costas, por celebrarse en la playa, y que durante los últimos años ha sido motivo de confrontación con el Gobierno. Respecto al resto de actos falleros, desde la Concejalía aseguran que no habrá recortes, y que «se intentará mantener los actos con menos dinero», como ya contó LAS PROVINCIAS. La Junta Central Fallera contará en 2012 con un presupuesto un 10% menor que este año.

«Austeridad»

«Se trata de apretarse el cinturón, y hacer las mismas cosas con mayor esfuerzo y austeridad», dijo entonces el edil Francisco Lledó, que ha rebajado la partida de la junta a los 1,8 millones de euros. Ya se redujo el presupuesto de las fallas municipales, encargadas a Alejandro Santaeulalia y Vicente Llácer, que este año costarán 225.000 euros. El año anterior sólo el monumento grande llegaba a superar esta cifra.

Se mantiene, no obstante, la subvención concedida a las comisiones de la ciudad de Valencia, que reciben un 21% en el caso del monumento y un 20% del coste total del alumbrado.

Fuente:Las Provincias