Peñarroja - XXI Gran Premio de Bilbao

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Creado en Jueves, 25 Agosto 2011 14:34

Escrito por Daniel Pérez - dpm_17 @ pirofan.com

Ayer, 24 de Agosto, fue el turno de Pirotecnia Peñarroja en el Gran Premio Internacional de Fuegos Artificiales “Villa de Bilbao”. El tiempo no acompañó durante el montaje y en varias ocasiones la lluvia fue persistente, lo que retrasó la finalización del montaje hasta última hora de la tarde.

El equipo de Peñarroja acudía esta vez a la Aste Nagusia como participante en la modalidad de Concurso, ya que otras veces había disparado en la ronda de Exhibición que se realiza a días alternos con la de Concurso. Los de la Vall d´Uixó prepararon un gran espectáculo con entusiasmo y con ganas de hacer disfrutar a la gente.

Dada la organización de disparos alternos de Concurso y Exhibición y la diferente zona de montaje, los participantes disponen de un primer día para colocar únicamente la herramienta, cosa que facilita las labores de preparación para grandes despliegues. Así fue, Peñarroja dispuso toda la herramienta en la zona de fuegos a lo largo del día 23 y lo taparon con plásticos y toldos para protegerlo de la humedad y de la posibilidad de lluvia.

Contra el tiempo pero exitoso disparo

Las previsiones indicaban una jornada de lluvia, sin duda el peor enemigo de los pirotécnicos a la hora de trabajar, y ante una jornada complicada los de Peñarroja decidieron comenzar el montaje muy temprano, a las 6 de la mañana. La ciudad de Bilbao amaneció triste y encapotada y el txirimiri (como ahí lo llaman) se dejó ver de vez en cuando, y más tarde la lluvia fue incluso más intensa. (El que suscribe vivió la jornada de trabajo sufriendo las inclemencias meteorológicas como si fuera uno más en el montaje, debía permanecer al pie del cañón.)

El 90% del castillo estaba preparado para dispararse de forma digital, es decir, todas y cada una de las carcasas (salvo algún grupo aislado) contaban con su inflamador individual que venían ya colocados de fábrica, además de llevar una pequeña etiqueta identificatoria para saber a que módulo y línea hay que colocarlo. Sin duda algo que lleva muchas horas de trabajo y más si se trata de espectáculos de gran formato como este caso (más de 2000 líneas en este caso). Así Pepe Nebot (hijo de José Vicente Nebot Peñarroja) apuntó:

Sí, lleva más trabajo que un montaje tradicional, está claro, pero el resultado final no es el mismo. Lo que mas horas de fábrica nos lleva es preparar todas las plataformas de monotiros (montar y conectar).

Cables y más cables. Una vez se colocan las carcasas sobre sus morteros se estiran y juntan los cables que van a un mismo módulo. Ya se pueden cargar y conectar. Cada trabajador hace una pequeña parte de la cadena, en todo momento bajo el mando de José Vicente y Pepe, siendo este último (a sus 18 años) el que lleva un control mas preciso del castillo, sin duda una gran promesa del fuego.

Por otra parte se colocaron las posiciones de digitales, de forma algo oblicua. José Vicente afirmó:

Nosotros sabemos la posición del jurado, pero mi hijo y yo hemos preparado un espectáculo para el público de Bilbao y los que se colocan en aquella posición (señalando a la zona hacia la que estaba ligeramente girado) también tienen derecho a verlo bien.

Lo último en cargar fueron los grandes calibres, los que requieren un trato especial. Tras ello tiraron mangueras a los spliters y hacer el chequeo desde las máquinas de disparo. Se utilizaron varios ordenadores para disparar el castillo.

"Desde Castellón a Bilbao": Elegante estilo Levantino

Como viene siendo costumbre en su estilo, Peñarroja abrió el espectáculo con 6 cortas composiciones usando efectos que volvería a disparar luego, algo así como un aperitivo de lo que había preparado para esta gala. Las realizaciones contaron con pies de fachada en movimiento digital y arcos con carcasitas, incluso una de ellas que primero hizo en un sentido la repitió después en sentido opuesto con otros colores (crosettes y lentejuela). Y es que hubo casi de todo en esta primera parte, sauce con punta, descargas de trueno, lentejuela con punta de color, kamuros, crossetes, cracker… y es que estaba tan pensado que quiso terminar con marcaje de truenos y en el efecto de kamuro con centro de color fucsia, justo el que sería el final de sus secciones antes de los prefinales.

Comenzó, ahora sí, con la parte principal del castillo, y lo hizo con piezas que primero abrían en aro luego encendían completas en forma de peonía (también había mariposas). Disparó después con ritmo más relajado hojas de caída lenta. El siguiente conjunto fue de intermitentes en 3 colores, verde, rojo y blanco en el que fue jugando con el paso de unos colores a otros dejando caer tras el arrebato gusanillos o guirnaldas rojas.

La siguiente sección fue la primera en fachada primero a 2 y pasando a 3 alturas con lentejuela blanca y punta roja. La segunda parte de la sección pasó a tener 3 pavos reales de volcanes de lentejuela con silbatos en el pie de la fachada (en la primera parte fueron cruzados de candelas). Los relámapos de color fueron acompañados por escalas de truenos, así, quedaban en una primera altura los relámapos y por encima los truenos. Continuó con magnolias blancas en fachada con rayos blancos en el pie primero cruzadas desde candelas y luego el pie de la fachada pasó a tener movimiento digital a la vez que las carcasas tenía mayor calibre.

De nuevo momento relajó el ritmo de disparo usando fantásticas ruedas de doble subida de lentejuela amarilla (de dos en dos) a modo de introducción a este efecto ya que fue la base del siguiente conjunto en fachada de lentejuela amarilla con punta azul. Apareció entonces la primera coreografía digital aislada de la noche con movimiento progresivo y en aceleración con meteoros de colores, haciendo de introducción a los crisantemos multicolores que vinieron después.

El sauce de oro viejo fue lo que Peñarroja utilizó en su siguiente sección, primero con punta verde en fachada y luego con lágrima blanca en la que de nuevo la primera altura de la fachada a base de volcán de oro con trazante y purpurina blanca llevaba movimiento. Terminó con una gran japonesa de centro intermitente blanco con cambio a punta intermitente. Hizo dos alturas con arañas de cracker y carcasas de huevo de dragón haciendo grandes soles.

Una gran palmitada con espigas blancas fue la primera altura de la fachada de farfallas con centro de lentejuela amarilla y punta azul. Luego disparó geométricas tales como estrellas, espirales, corazones,… un efecto que aunque simple siempre llama la atención del público.

Siguió con fachada de tremolantes calabaza y blanco usando como pie tridentes de candelas con punta de diamantina verde y fucsia. En una segunda parte de la sección el pie fue de con volcanes de punta cracker, la siguiente altura fue con espigas blancas y en el último piso color fucsia. Sin duda el conjunto más espectacular fue el de kamuro con punta fucsia, ejecutado en dos fases. La primera en dos alturas con candelas en el pie y la segunda con hasta 4 alturas. Arco de volcanes de intermitente fucsia y serpentina, trazantes verticales de kamuro con punta de fucsia y otros dos pisos de kamuro. Coronándolo puso grandes y fantásticas japonesas con pistilo fucsia (lástima que el humo y la niebla dificultaran la visión).

Antes de entrar a los prefinales deleitó al público con una coregrafía digital que antes de terminar ya estaba siendo aplaudida. Los prefinales multicolores fueron ganando fuerza con todo tipo de efectos acompañados por pitos, silbatos y truenillos y apuntalado con potentes truenos, al más estilo levantino, terminando con cientos de torbellinos. Al bombardeo de truenos le añadió un toque más detallista acompañándolo con varios abanicos de monotiros para terminar con una cortina de rayos blancos y potentísimos truenos.

Agradecimientos:

Pirotecnia Peñarroja

Ayuntamiento de Bilbao

Sociedad Bilbaína

Puedes ver más reportajes de Bilbao 2011 en el especial de Startecnia

A continuación video del espectáculo y galería fotográfica.

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